México, una excepción a la diplomacia coercitiva de Trump

El enfoque preferido de Donald Trump para tratar con la mayoría de los países del mundo ha sido la “diplomacia coercitiva”: amenazar con consecuencias si otros no cumplen con sus exigencias. 

Sin embargo, México ha sido la excepción a esta regla, con su presidenta Claudia Sheinbaum, mostrando lo que ella llama “cabeza fría” y continuando el diálogo con Trump y su istración en varios niveles de las negociaciones.

Durante la videoconferencia: “Relaciones México-Estados Unidos: ¿Un modelo para la diplomacia en la era Trump? organizada por ACOM American Community Media, académicos y analistas analizaron cómo la presidenta de México ha mantenido las líneas abiertas con el presidente y lo que está en juego para ambos países.

David Ayón, Investigador principal del Centro Leavy para el Estudio de Los Ángeles de la Universidad Loyola Marymount, dijo que ninguno de nosotros sabe cómo trata Trump a la presidenta Sheinbaum en sus llamadas y reuniones.

“Mi mejor suposición es que probablemente le ha transmitido a Trump que ambos, México y Estados Unidos han invertido mucho en mantener la estabilidad de la relación, y que lo que México le ha ofrecido de gran valor a Trump es esta sensación de normalización de que no está loco”.

Mencionó que incluso después de que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum fue electa, ella dijo que Trump no iba a hacer las cosas de las que hablaba, y que se trataba de pura politiquería electoral.

El profesor Ayón sostuvo que los aranceles han tenido efectos claros tanto en el valor del peso como en el flujo de inversión extranjera en buques hacia México. 

Sin embargo, México, durante tres istraciones consecutivas, ha optado por intentar apaciguar esta amenaza para mantener los flujos de inversión extranjera y el valor del peso.

“Tanto AMLO (Andrés Manuel López Obrador) como Claudia Sheinbaum han tenido mucha suerte para manejar a Trump, incluso con la COVID-19, el gobierno mexicano”.

Y dijo que han convencido a los mercados e inversionistas extranjeros de que México sigue comprometido con un modelo económico muy internacionalizado y un nuevo modelo económico.

“Hay numerosos informes de que Estados Unidos ni siquiera tiene la capacidad aduanera en su puerto para aplicar los aranceles; hay grandes retrasos, buques portacontenedores que están siendo detenidos, mientras que México está expandiendo su capacidad para participar en el comercio global con el Puerto de Manzanillo. 

“Creo que esto es prácticamente un monumento a la forma en que esta serie de istraciones mexicanas han abordado tanto su propio modelo económico, el mundo y cualquier cosa que provenga de Estados Unidos”.

Una relación muy importante

Luis Alvarado, analista político, dijo que México está creciendo a pasos agigantados, tanto económica como socialmente. 

“Históricamente han sido mexicanos los que intentan salir de México en busca de una vida mejor, y ahora vemos que la mayoría de quienes llegan a la frontera provienen de Sudamérica y Centroamérica, porque los mexicanos disfrutan de un crecimiento que contribuye a la estabilidad en México”.

Dijo que está claro que todos vemos los titulares de las noticias sobre los cárteles y el fentanilo, pero es innegable que en general, en el sentido más amplio, México goza de una economía muy sólida.

“Algo que me llamó la atención, poco después de que la presidenta electa Scheinbaum prestara su juramento, fue el desfile de figuras clave de Wall Street que llegaron a la Ciudad de México para asegurar la relación con México. 

“Donald Trump tiene la mirada puesta en Wall Street para determinar el éxito o el fracaso en materia económica. Así que la relación entre Wall Street y México se volvió muy importante, mientras que, en contraste, Trump ve a Canadá simplemente como el estado número 51 de Estados Unidos”.

¿Diplomacia coercitiva?

Alberto Diaz-Cayeros, profesor del Freeman Spogli Institute, y exdirector del Center for Latin American Studies (CLAS) en Stanford, dijo que mayormente, Trump ha usado el tema de los aranceles con fines geopolíticos, más que de comercio.

“La mejor manera de describirlo y explicarlo es mediante un trabajo realizado por un economista muy importante, Albert Hirschman, que en su libro de 1945, explica cómo se utilizaron los aranceles en el período de entreguerras en Europa para construir coaliciones y negociar con los países vecinos”.

Dijo que en particular la Alemania nazi los utilizó para establecer una zona de seguridad con Rumania, Hungría y Bulgaria. 

“Este trabajo de Hirschman es increíblemente esclarecedor, ya que nos habla también de cómo los aranceles en América Latina, en zonas donde existía un entorno de libre comercio más limitado, siempre han tenido un componente estratégico para construir esferas de influencia favorables”.

Dijo que si no lo pensamos en esos términos, nos estamos perdiendo el objetivo de Trump con muchas de sus políticas arancelarias. 

“No se trata necesariamente de los efectos directos en el comercio ni de lo que ocurre con los inversores en Wall Street, se trata de cómo Estados Unidos encontrará su nuevo lugar en el mundo y sus esferas de influencia, y del lugar que ocupa México en este contexto”. 

Y, en cierto modo, señaló que México está teniendo suerte en estas esferas de influencia, porque podríamos terminar con tratos arancelarios preferenciales que el resto del mundo no podría obtener.

La naturaleza política

Larry Rubin, presidente de la Junta de la American Society of Mexico, dijo que los aranceles y el acero también tienen una naturaleza política, relacionada con la ubicación de la industria siderúrgica y el cinturón industrial.

“La industria automotriz, que es el principal exportador de México a Estados Unidos, solo afecta a alrededor del 2% del total de vehículos fabricados en México con destino a Estados Unidos, ya que el resto cumple con los requisitos del T-MEC”. 

Por lo tanto,  afirmó que México, en cierto sentido, está protegido económicamente por estos aranceles que han entrado en vigor a nivel mundial, y parte de ello se debe a la importancia estratégica de México, y a las tres prioridades del presidente Trump: el narcotráfico, el fentanilo, la inmigración y la economía, en las que México desempeña un papel crucial. 

“Probablemente ningún otro gobierno ni ningún otro país desempeña un papel tan crucial como el de México. Por eso, México y Estados Unidos mantienen una relación muy particular; y esa ha sido una de las fortalezas de México y seguirá siéndolo, a pesar de que 38 millones de mexicoamericanos viven en Estados Unidos, el 12 % de la población estadounidense”.

Pero hizo ver que también dos millones de estadounidenses viven en México, y económicamente el mayor socio comercial de EE. UU. es México, es decir, el 15% del comercio total y el otro 14% es Canadá. 

“La American Society es una organización no partidista sin fines de lucro fundada en 1942, y parte de nuestro objetivo es, ¿cómo podemos cerrar las brechas no solo entre los dos países, sino también entre los dos gobiernos?”.