Hispanos son clave para el liderazgo estudiantil de EEUU
Los latinos pueden lograr que el país recupere el ranking mundial en graduados universitarios
Washington – Si EEUU quiere recuperar su primer lugar mundial en graduados universitarios tiene hasta 2020 para aumentar el número de latinos con diplomas, comenzando en California, que se mantiene a la zaga, según advirtió este martes un estudio.
El análisis del grupo Excelencia en Educación ofrece un diagnóstico sobre el avance académico de los latinos, e identifica programas estatales que han mejorado sus tasas de inscripción, retención y graduación en las universidades.
“Se requieren inversiones, liderazgo y compromiso de las universidades. Nuestros datos muestran que hay oportunidades para que todas las partes interesadas, no solo los latinos, contribuyan a nuestra meta nacional“, explicó Deborah Santiago, coautora del informe y una de las principales ejecutivas de Excelencia en Educación.
Según el documento, California tiene la mayor población hispana en EEUU, seguido por Texas, Florida, Nueva York, e Illinois, pero sólo una de sus universidades, East Los Angeles College, figura entre las cinco principales instituciones con mayor número de latinos.
Peor aún, ninguna de sus universidades entró en la lista nacional de las cinco que otorgaron licenciaturas a hispanos entre 2011 y 2012. Solo el 16% de los latinos en California adquirió un diploma universitario, comparado con el 38% de su población total.
En cambio la Universidad de Phoenix en línea sí logró un puesto en la lista.
Además, hay una verdad universal: quienes logran un diploma universitario perciben mejores salarios y, por ende, pagan más impuestos y aumentan las arcas del estado.
En Texas, sólo el 16% de los latinos obtuvo un diploma, frente al 32% de la población, mientras que en Nueva York, los porcentajes fueron del 22% para los latinos y el 41% de la población.
A nivel nacional, sólo el 20% de los latinos a partir de 25 años de edad había obtenido un diplomado o una licenciatura, en comparación con el 36% de todos los adultos.
El informe no explica el por qué de los resultados, pero Santiago espera que esto genere un diálogo, especialmente en California, porque, a su juicio, el problema no es cultural y “ningún estudiante se matricula con la intención de fracasar”.
Sin embargo, continuó, sí hay barreras de costo, apoyo y capacidad que contribuyen a los bajos niveles de graduación.
En todo caso, las universidades, los políticos, padres de familia, educadores, líderes comunitarios, donantes, y hasta la prensa tienen parte de responsabilidad, porque el bienestar económico de EEUU dependerá de una fuerza laboral educada, según Santiago.
El presidente Barack Obama quiere que para 2020 EEUU haya recuperado el primer lugar en su ránking mundial de graduados universitarios, pero los latinos deberán obtener más de la mitad de los 9 millones de diplomas adicionales requeridos para cumplir esa meta, es decir 5.5 millones.
A seis años del plazo, más latinos terminan la secundaria y van a las universidades, pero aún no cierran la brecha académica con los blancos.
Es algo alarmante porque los latinos son la minoría de mayor crecimiento, tienden a ser más jóvenes –con una edad media de 27, comparado con una de 42 de los blancos- y conforman el 22% de la población estudiantil.
La educación, que para los latinos empieza con trabas desde la edad preescolar, es pieza clave en la lucha por la equidad salarial, otra de las escurridizas metas de Obama.